
Derogación de Especies Fiscales y Timbres. Un Avance Hacia la Simplificación Tributaria en Costa Rica
Descubre cómo la reciente derogación de especies fiscales en Costa Rica, bajo la Ley Simple 1, está simplificando los procesos tributarios y de contratación pública. Este blog detalla los cambios clave y su impacto en la eficiencia y competitividad del país.
El pasado 3 de diciembre de 2024, se publicó en el Alcance No. 195 de la Gaceta No. 227 el Decreto Legislativo No. 10586, también conocido como la Ley “Simple 1: Simplificación de Impuestos para levantar la Eficiencia y la Competitividad (Fase 1)”. Este decreto marca un hito importante en la modernización de los procedimientos tributarios y de contratación pública en Costa Rica, eliminando formalmente varias especies fiscales y timbres que previamente eran obligatorios.
¿Qué establece la Ley 10586?
La Ley 10586 tiene como objetivo principal simplificar procesos y reducir la carga administrativa asociada a ciertos tributos. En este contexto, se derogan:
- El artículo 3 de la Ley 6496: Este artículo creaba el timbre para la Asociación Ciudad de las Niñas y regulaba el traspaso de inmuebles.
- Varios artículos del Código Fiscal: Entre ellos, los artículos 239 al 248 y 272 al 274, que incluían disposiciones relacionadas con el reintegro de papel y las especies fiscales.
Impacto en la Contratación Pública
La Dirección de Contratación Pública (DCoP), como órgano ejecutor de la Autoridad de Contratación Pública, en la Circular MH-DCoP-cir-0091-2024, subrayó la importancia de esta modificación legislativa. La eliminación de estas obligaciones fiscales simplifica los procedimientos relacionados con la contratación estatal, reduciendo costos y plazos para las partes involucradas.
Las entidades contratantes y demás operadores de la contratación pública deben adaptar sus procesos a esta nueva realidad, dejando de lado el uso de los timbres y especies fiscales ahora derogados.
Hacia una Contratación Más Ágil y Competitiva
La simplificación de requisitos fiscales no solo mejora la eficiencia administrativa, sino que también promueve un entorno más competitivo. Al eliminar costos adicionales asociados a los timbres y especies fiscales, se crea un panorama más accesible para potenciales oferentes, particularmente para pequeñas y medianas empresas.
Conclusión
La entrada en vigencia de la Ley 10586 refuerza el compromiso del país con la modernización de su marco regulatorio y la promoción de la eficiencia en la gestión pública. Es crucial que todos los actores involucrados en los procesos de contratación y gestión administrativa conozcan y adapten sus operaciones a estas disposiciones.Reiteramos nuestra disposición para apoyar a las entidades contratantes y al público en general en la transición hacia este nuevo marco normativo. Para más información, visite el sitio web del Ministerio de Hacienda: www.hacienda.go.cr.